MUSEU DIOCESÀ DE TARRAGONA
RETABLO DE SAN PEDRO DE VINAIXA
El retablo procede de la Iglesia san Juan Bautista de Vinaixa, población de la comarca de Les Garrigues, Lleida. En el año 1887, estaba en la iglesia dedicada al culto en un altar del presbiterio, en la parte de la Epístola, fue retirado a la sacristía o a la casa rectoral hacia el año 1909, para colocar un altar del Sagrado Corazón; al año siguiente se traslada el retablo a Tarragona, para que fuera depositado en el Seminario, donde se recogían antigüedades con vistas a la definitiva organización del Museo Diocesano, instalado desde 1869 en la antigua capilla de santa Tecla. En la actualidad está expuesto en la sala número II, Del gótico al barroco, en la Capilla del Corpus Christie, antigua Sala Capitular, situada frente al Claustro de la Catedral.
Lo primero que
se aprecia al contemplar esta obra, es que ha sido restaurada recientemente,
tanto el dorado como el colorido de las pinturas resplandecen bajo los focos
que iluminan el retablo. Se aprecian las
siguientes características: el retablo es rectangular, colgado verticalmente y
compuesto por tres tablas rectangulares y predela. La tabla central mide 1,77 x 0,60 m y tiene
dos compartimentos: el inferior y principal de 1,10 m de altura y el superior o
ático de 0,67 m de altura. Las tablas
laterales, miden 1,60 x 0,54 m, están divididas en tres compartimentos, de los
cuales, los dos más bajos miden 0,51 y los superiores 0,58 m de altura. Estas tres tablas están clavadas a tres
travesaños, maderos macizos de unos 10 x 10 cm, que sirven de sujeción. La predela mide 1,75 x 0,31 m, consta de siete
cuadros de 0,25 m. de ancho, con figuras de medio cuerpo.
Los fondos son
dorados con ornamentaciones e incisiones en forma de ramilletes trifoliados;
los paisajes de campo, tienen al fondo las montañas de formas exageradamente
fantásticas; los nimbos de los santos ornados también con incisiones sobre
dorado, tienen el círculo exterior pintado de negro, en las figuras del
calvario y en las de predela, alternan puntos negros y blancos.
La parte
arquitectónica del retablo, la forman columnitas en espiral, rematadas en
pináculos. Las tres tablas están
coronadas por arcos apuntados, de madera dorada superpuesta, la parte superior
de los arcos están decorados con crestería y rematados por florones. El resto superior de las tablas, por encima
de los arcos apuntados, esta pintada en azul y salpicada con decoración tipo
floral. Los encasamientos están
separados, horizontalmente, por cordoncillos de madera dorados en forma de
espiral y por arquitos polibulados.
Como detalles
característicos de estilo y de técnica se ha de remarcar la finura y
minuciosidad de las pinceladas, y la precisión y seguridad de las líneas. La pintura de este retablo representa un arte
muy seguro y original.
Hay quince
escenas:
ocho en el
retablo: 1 / 2 (centro) // 3 / 4 / 5 (izq.) // 6 / 7 / 8 (der.)
siete en la
predela: 9 / 10 / 11 / 12 / 13 / 14 / 15
1 / CALVARIO
Suele ser el
tema que predomina en el ático de los retablos góticos. Composición muy sencilla: en el centro, Jesús
crucificado a una cruz de madera, desnudo, cubierto con el perizorium, está
sujeto con tres clavos, un clavo en cada palma de la mano y otro clavo en los
pies, en el costado tiene la llaga abierta sangrante. A los dos lados de los pies de la Cruz: la
Virgen de los Dolores a la derecha, vestida de rojo y cubierta por un manto
azul y san Juan a la izquierda, el apóstol preferido de Jesús, con una túnica
roja y un manto azul.
“Cuando
llegaron al lugar llamado Calvario, crucificaron allí a Jesús” Lc. 23, 33. Había también una inscripción sobre Él, en
letras griegas, latinas y hebreas: “Este es el Rey de los judíos” Lc,
23, 38. Hacia la hora sexta, las
tinieblas cubrieron toda la tierra hasta la hora nona. El sol se eclipsó, y el velo del Templo se
rasgó por medio. Y Jesús con fuerte voz dijo: “Padre, en tus manos
encomiendo mi espíritu”. Y al decir esto expiró” Lc. 23, 44-47.
2 / SAN PEDRO DE PONTIFICAL
San Pedro con
la tiara y las llaves sentado en el trono.
“Los nombres de los doce Apóstoles son:
primero, Simón, el llamado Pedro” Mt. 10, 2.
Jesús le dice:
Yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las
puertas del infierno no prevalecerán contra ella.
“Te daré
las llaves del Reino de los Cielos y lo que atares en la tierra, será atado en
los Cielos, y lo que desatares en la tierra, será desatado en el cielo” Mt.
16, 18-20.
Jesús, jugando
con las palabras compara los pescadores de peces con los pescadores de almas; más
aún en un calambur –Tú eres Pedro (Petrus) y sobre esta piedra (petra)
construiré mi Iglesia- se basa la primacía de la Iglesia de Roma.
¿Qué es La entrega
de la Ley o de las llaves a san Pedro, si no una variante de la Liberalitas
Augusti? Basta para convencerse comparar
este tema con un bajorrelieve del Arco de Constantino, de comienzos del siglo
IV, donde se ve al emperador victorioso distribuyendo el congiarium a un
personaje que recibe la tablilla en un paño de su manto. La Transfiguración sirvió de modelo a la Traditio
Legis a san Pedro y a san Pablo, quienes simplemente sustituyen,
respectivamente, a Moisés y a Elías.
La
glorificación del papado es uno de los temas esenciales propuestos a los
artistas para contrarrestar la ofensiva luterana que denunciaba a los sucesores
degenerados de san Pedro como secuaces del Anticristo.
Vestido con
los ropajes y la tiara de Papa, sentado en una estructura de madera, la
cátedra, una especie de podium sin brazos, en la mano derecha sostiene las
llaves, en el dorso de la mano tiene pintado un rombo, pero no se distingue si
hay algo dibujado, tal vez aquí estuvieran los símbolos de san Pedro: el gallo
y las llaves.
El gallo no es
sólo el símbolo de la negación de san Pedro, sino también la imagen de Cristo
triunfante sobre el poder de las tinieblas y de su Resurrección. Su canto matinal despierta no sólo del sueño,
sino también de la muerte.
En la mano izquierda
sostiene el Libro de la Ley. Está
representado como un hombre ya anciano, con barba y pelo blanco, investido de
sabiduría y de la gracia de Dios.
No fue hasta
el siglo V cuando aparecieron los primeros atributos individuales: la llave de
san Pedro. Entre los atributos
simbólicos se puede citar la palma de los mártires, la llave de san Pedro y el
cordero pascual de san Juan Bautista. Patronazgos
nacidos de atributos: los cerrajeros eligieron a san Pedro por su llave.
3 / VOCACIÓN DE SAN PEDRO CERCA DEL LAGO DE TIBERIADES
Cristo y Pedro
caminando sobre las aguas. Bajo de los
arquitos polibulados, Simón, pescador de Galilea subido en la barca echa las
redes, vestido con una túnica marrón y cubierta la cabeza: “no uso más ropa que
una túnica con capucha, con esto me conformo, porque esta sola prenda me
basta”. A la izquierda san Pedro
arrodillado en el río, vestido con una túnica roja, está mirando hacía Jesús; a
la derecha, Jesucristo, joven, imberbe, vestido con una túnica rosada y manto
verde, alarga sus brazos e invita a Pedro a que se haga pescador de
hombres.
Las leyendas
de muchos santos no son más que el desarrollo de su nombre; al bautizar al
galileo Simón con el nombre de Kefás o Pedro, Jesús lo marcaba de antemano para
ser la piedra angular de su Iglesia.
Andando junto
al mar de Galilea, vio dos hombres: Simón, llamado Pedro, y Andrés, su hermano,
echando la red en el mar, pues eran pescadores. Y les dijo: “Venid conmigo, y os haré
pescadores de hombres. Ellos al
instante, dejando las redes, lo siguieron” Mt. 4, 18-20.
Y Jesús dijo a
Simón: “Deja de temer, desde ahora serás pescador de hombres” Lc. 5, 10.
Andrés
encontró a su hermano Simón, y le dijo: “Hemos hallado al Mesías” (que
significa el Cristo). Y le llevó a Jesús.
Jesús lo miró y dijo: “Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú serás
llamado Cefas” (que significa piedra) Jn 1, 41.
La segunda
categoría de atributos se adoptó a partir del oficio del santo … la red de
pescador de san Pedro.
4 / SAN PEDRO ENTRONIZADO EN ANTIOQUÍA O LA "TRADITIUM CLAVIUM"
Entrega de las
llaves a san Pedro. Composición
notablemente singular. En la escena san
Pedro vestido de Pontifical, sentado en la cátedra, entrega las llaves que
sostiene con su mano izquierda a sus discípulos, con la derecha sujeta el libro
de las leyes que apoya en su rodilla.
Según Eusebio
de Cesarea en su Historia Eclesiástica, san Pedro habría fundado la Iglesia de
Antioquía: “reconociéndole verdaderamente como varón apostólico y siendo él
mismo pastor sincero y bueno, le hace entrega de su rebaño de Antioquía y le
pide que cuide de él con gran esmero”.
Platón y
Aristóteles son los príncipes de los filósofos, como san Pedro y san Pablo son los
príncipes de los apóstoles.
5 / SAN PEDRO Y SAN PABLO ANTE NERÓN, EN LA ESCENA DEL VUELO FRUSTRADO DE SIMÓN MAGO
Simón cae de
su vuelo diabólico delante de Nerón, por las oraciones de san Pedro de pie y de
san Pablo de rodillas a la izquierda de la escena. En la parte superior Simón volando y cayendo:
debajo de un arquito, un murciélago negro con brazos extendidos lanza a Simón
al vacío. A la derecha Simón el mago ya
muerto, sin rostro y vestido de negro; y otro personaje también sin rostro
vestido como un cortesano, podría ser Nerón.
Había en
Jerusalén un mago, llamado Simón, que aseguraba ser la verdad suprema, presumía
de omnipotencia y prometía la inmortalidad a cuantos creyeran en él. Este mago, quiso sostener un debate público
con san Pedro, Simón dijo: “puedo volar por el aire”, se subió a una torre muy
alta y se lanzó al espacio y empezó a volar. Pablo se puso a orar y Pedro exclamó:
¡Espíritus de Satanás que lleváis a este hombre por el aire! ¡Yo os mando que no
lo sostengáis más y que lo dejéis solo para que caiga y se estrelle! Simón desde lo alto cayó al suelo, se rompió
la cabeza y quedó muerto.
El murciélago,
es una de las dos encarnaciones del demonio, del príncipe de las tinieblas, y
por eso Satanás se representa con alas de murciélago. Animal híbrido, a la vez pájaro y ratón,
simboliza la duplicidad, la hipocresía.
6 / PEDRO ES LIBERADO DE LA CÁRCEL POR UN ÁNGEL
A la derecha
de la escena la cárcel, parece una estructura metálica reforzada con tachuelas,
la ventana tiene rejas, a la izquierda san Pedro liberado antecedido por un
ángel rubio con grandes alas. Debajo de
la ventana, los dos guardianes están sentados, medio adormilados, aguantan unas
lanzas.
Intervino
entonces el Pontífice con todos los de su partido, la secta de los saduceos. Llenos de celos, prendieron a los Apóstoles y
los metieron en la cárcel pública. Pero
un ángel del Señor abrió por la noche las puertas de la cárcel, los sacó y
dijo: “Id al Templo y anunciad con valentía al pueblo todas las palabras de
esta Vida" Act. 5, 17-19.
Los alguaciles
fueron, pero no lo encontraron en la cárcel; volvieron y lo comunicaron
diciendo: “Encontramos la cárcel cerrada cuidadosamente y guardias junto a
las puertas, pero al abrir, a nadie hallamos dentro” Act 5. 22, 23.
Leyenda de
origen iconográfico: san Pedro encerrado en Roma en la cárcel de Mamertina,
donde hizo brotar una fuente con cuyas aguas habría bautizado a sus carceleros,
Proceso y Martiniano.
7 / APARICIÓN DE JESÚS A PEDRO EN LAS AFUERAS DE ROMA
¿Escena del
Quo Vadis? Jesucristo vestido con una
túnica blanca, sin sandalias, se aprecian los estigmas en los pies y en la mano
derecha que sostiene la Cruz que lleva al hombro. San Pedro cae de rodillas con las manos
cruzadas sobre el pecho. Las dos figuras
y la cruz ocupan casi todo el espacio, para dar importancia a la escena. Detrás de ellos una torre y la muralla de Roma
para contextualizar este pasaje.
Cuando Pedro
salió de la cárcel se dispuso a salir de Roma, y al llegar a una de las puertas
de la muralla, vio a Cristo que venía hacia él. Pedro, al verlo, le dijo:
Domine, quo
vadis? o sea, Señor, ¿a dónde vas?
A Roma, para
que me crucifiquen de nuevo.
¿Para que te crucifique
de nuevo?
Sí, contestó
el Señor.
En ese caso me
vuelvo para que me crucifiquen también a mí contigo.
San Pedro se
dio cuenta de que la crucifixión de que Cristo había hablado era la que a él le
aguardaba.
8 / CRUCIFIXIÓN DE SAN PEDRO
En esta escena
del martirio de san Pedro, hay cinco figuras, en el centro san Pedro atado a
una gran cruz plantada cabeza abajo, lleva una túnica verde sujeta con un
cordel a la altura de los tobillos. A
los dos lados del travesaño de la cruz los verdugos, con los rostros
desdibujados, están crucificando a san Pedro. En los extremos, dos individuos, vestidos con
ricos tocados y ropajes, están verificando que la sentencia de Nerón se cumpla.
Al fondo la muralla de la ciudad de
Roma. Arriba, debajo de uno de los
arquitos lobulados: la Dextera Domine, la mano de Dios bendiciendo a san Pedro.
San Pedro
volvió sobre sus pasos, se internó en la ciudad. Los soldados de Nerón lo detuvieron; Agripa
condenó a Pedro a morir en una cruz. En
el momento en que Pedro iba a ser crucificado dijo: que le pusieran la cabeza
abajo y los pies arriba, porque no era digno de morir de la misma manera que el
Señor. Los verdugos tuvieron que acceder.
San Pedro dio gracias a Dios, encomendó
a su misericordia a los creyentes, y expiró.
La Iglesia
latina se enorgullecía de la humildad de san Pedro al hacerse crucificar boca
abajo.
PREDELA // 9 / 10 / 11 / 12 / 13 / 14 / 15 //
Se reconoce a
san Bernardo porque va vestido con la túnica blanca de los monjes de Claraval,
fue su primer abad; y porque lleva el báculo de obispo, fue obispo de
Chalons-sur-Marne. Con una mano velada
con la manga de la túnica sujeta el báculo.
En 1112,
Bernardo, que contaba veintidós años, acompañado de más de treinta jóvenes,
ingresó en la Orden de los Cistercienses. Posteriormente, el abad del Cister encomendó a
algunos de sus religiosos la fundación de Claraval y puso a Bernardo al frente
del nuevo monasterio.
Los persas
sólo podían aproximarse al rey para saludarlo o presentarle una demanda con las
manos ocultas en las mangas del vestido. Alejandro Magno introdujo esta práctica entre
los griegos. De la misma manera, los
romanos se aproximaban así para recibir el donativum. Los judíos de la Antigua Ley conocían
igualmente esta manera de testimoniar respeto al aproximarse a la divinidad, o
bien para rezar, o bien para recibir sus mandamientos: velatis manibus. Encontramos lo mismo en el Nuevo Testamento. El
anciano Simeón se vela las manos para recibir al Niño Jesús en el Templo y
también san Pedro para recibir las llaves simbólicas. Es un gesto de deferencia
más que de oración.
10 / SANTA CATALINA
Se reconocen a
primera vista a san Pedro por su llave y a santa Catalina por su rueda dentada.
El Emperador Maximiano acudió a Alejandría para presidir una gran fiesta pagana. Catalina aprovechó esta ocasión para intentar
la conversión del Emperador al cristianismo, lo que despertó su cólera. Para ponerla a prueba le impuso un debate
filosófico con cincuenta sabios a los que trataría de convertir. Catalina lo
logró, lo que provocó la ira del Emperador, que hizo ejecutar a los sabios, no
sin proponerle antes a Catalina que se casara con uno de ellos, a lo que ella
se negó rotundamente. El Emperador
ordenó, entonces, que torturaran a Catalina utilizando para ello una máquina
que tenía unas ruedas guarnecidas con pinchos. Milagrosamente las ruedas se rompieron al
tocar el cuerpo de Catalina. Obstinado, Maximiano ordenó su ejecución y fue decapitada.
11 / LA DOLOROSA
El dolor de la
Virgen María que sufre al ver a su Hijo muerto en la cruz.
Estaban en pie
junto a la cruz de Jesús, su madre, María de Cleofás, hermana de su madre, y
María Magdalena. Jesús, viendo a su madre y junto a ella al discípulo que Él
amaba, dijo a su madre: “Mujer, he ahí tú hijo”, luego dijo al
discípulo: “He ahí a tu madre”. Y desde aquel momento, el discípulo la recibió
consigo, Jn. 19, 25-27.
Los siete
dolores de la Santísima Virgen que han suscitado mayor devoción son: la
profecía de Simeón, la huida a Egipto, los tres días que Jesús estuvo perdido,
el encuentro con Jesús llevando la Cruz, su Muerte en el Calvario, el
Descendimiento, la colocación en el sepulcro.
12 / CRISTO DEL DOLOR
La tragedia
Christus Patiens, atribuida a San Gregorio Nacianceno, se ubica en el siglo IV,
un período particular de la historia de la Iglesia, tanto en lo doctrinal como
en lo cultural, social y político. La
organización del corpus dogmático, el lugar del emperador respecto de la
institución eclesiástica y la asimilación de la cultura helénica pagana
plantean a los Padres Griegos diversos problemas por resolver.
13 / SAN JUAN EVANGELISTA
El apóstol más
joven y el preferido de Jesús. Fue el
apóstol que más quiso, el único de los doce apóstoles que estuvo bajo la Cruz, junto a María. Después de la resurrección de Jesús, junto a Simón Pedro,
vieron el sepulcro vacío. Acompañó a
Pedro en viajes de predicación a Samaria. Pablo de Tarso lo menciona como uno de los
pilares de la Iglesia.
14 / SANTA TECLA
Patrona de
Tarragona, alza entre sus dedos la Tau.
Tecla de
Iconio, más conocida como Santa Tecla. Fue
santa, en el período inicial de la iglesia y seguidora de Pablo en el siglo I. No es mencionada en el Nuevo Testamento, pero
los más antiguos registros de ella vienen de los apócrifos Actos de Pablo y
Tecla. Virgen y mártir. Es especialmente reverenciada en la iglesia
oriental, y es, asimismo patrona de la ciudad de Santa Tecla en El Salvador.
15 / SAN PABLO
Es el apóstol
que siempre se relaciona con San Pedro.
Los dos fueron a Roma a predicar y en esa ciudad murieron mártires. Según la tradición los dos apóstoles están
enterrados en Roma. San Pablo hizo mucho
para introducir el cristianismo entre los gentiles, es
considerado como una de las fuentes significativas de la doctrina de la Iglesia
primitiva.
A san Pedro se
le reconoce por su tonsura y a san Pablo por su calvicie.
Los santos
universales o ecuménicos son: san Pedro, san Pablo, san Miguel, san Jorge, san
Andrés y san Nicolás.
Imatges: 6 d'octubre de 2008